LA VERDAD HECHA PROPAGANDA SE CONVIERTE AUTOMÁTICAMENTE EN MENTIRA
DIOS ESTÁ PASADO DE MODA
“La propaganda no considera al individuo, sino a la masa, no apunta a la transformación íntima de las personas, sino a la difusión en tertulias oceánicas de consignas que dictan reglas de pensamiento y comportamiento; su finalidad no es el encuentro del Yo con el Tú, sino la uniformidad de un "sí" sin relaciones"
- Eugen Drewermann -
DIOS NO ES RELIGIÓN, ES RELACIÓN
Si pensamos por un momento que todas las religiones se basan en un propósito: “El plan que Dios tiene para ti, para que puedas realizarte a ti mismo” entonces Dios también tiene un plan que somos nosotros y en este caso somos su religión, somos su propósito. Esta proyección nos hace comprender cómo Dios no es más que nuestro mismo deseo INCONSCIENTE de superarnos a nosotros mismos, por lo que si este plan no se descubre dentro de nosotros (como una fuerza psíquica), adquiere estructura por fuera de nosotros y se convierte en RELIGIÓN, un fenómeno de masas, organización y política, si en cambio lo vivimos dentro ( como debe ser) se convierte en una RELACIÓN con uno mismo que nos lleva a descubrir todo nuestro potencial o divinidad, el Dios en nosotros, dentro de nosotros mismos y no un personaje fantasmagorico que vive escondido quien sabe donde detrás de quién sabe cual galaxia absurda. Dios es la unica salida de emergencia del labirinto de la psique donde el ser humano se ha encerrado en sì mismo (lo que llamamos Ego).
TODOS TIENEN UNA RELIGIÓN INCONSCIENTE
Jung decía que las religiones son sistemas de sanación para la psiquis, de hecho ya que el ser humano por naturaleza es religioso, es decir necesita creer en algo o alguien que lo trascienda y lo haga superar su límite de finitud material, por lo tanto cuanto más sana sea una persona espiritualmente, como concluyó Jung, más se desligará de la necesidad de la religión, pero de la religión entendida como un sistema externo, un comportamiento social colectivo, no interno y personal, porque el hombre a-religioso es igual de patológico, es inherente a nuestra naturaleza creer en algo que nos trasciende y nos supera.... todos creemos en algo o en alguien (creer en ganar la lotería, creer que tu equipo favorito que gana el campeonato, creer en tu novia, creer en un partido politico...etc ... incluso el ateo cree que Dios no existe y esa es su creencia o religión), el que no cree en nada esta espiritualmente enfermo, por eso a estas creencias se les suele llamar religiones, algunos luego las llaman ideologías, otros pasiones, arte, etc... religión entonces es todo lo que adoras como más superior que tu. Para Jung el psicoanálisis era de alguna manera su religión, un camino espiritual que lo ayudaba a trascenderse a sí mismo!!! El problema por tanto no es la creencia, sino el motivo por el que se hace y la conciencia con la que se cree. El comienzo de la salvación, por tanto, está en creer primero en uno mismo y desde ahí volver a empezar a conquistar la liberación de todas las falsas creencias.
RELIGIÓN
El término religión deriva del latín relìgio, cuya etimología no es del todo muy clara, pues tiene un doble sentido: religàre, es decir, "atar, amarrar", unir lo que està separado, en el sentido de vincular al hombre a la divinidad, pero era un término utilizado como "compromiso" (estoy atado a ti), mientras que la verdadera religión no ata sino que libera al hombre de la idolatría. Otros han interpretado el término "atadura" como una unión o vínculo entre el cielo y la tierra, Dios y el hombre, en el sentido de encontrar un ENLACE, por lo que la religión sería un camino de unión del hombre con su naturaleza divina: la uniòn del hombre consigo mismos, unir sus partes separadas. Sin embargo, antes de que los cristianos hicieran uso de este sentido de COMPROMISO, VÍNCULO (que tiene un sabor muy político e imperialista romano), según Cicerón (106 a. C.-43 a. C.), la palabra proviene del verbo "relegere", es decir “repasar” o "releer" o "profundizar", entiende bien lo que estás haciendo, lo que estás diciendo o creyendo, entonces sería una búsqueda de conciencia. La verdadera religión no ata sino que disuelve, no se compromete con las leyes, sino que libera con el espíritu. Desafortunadamente, el término religión siempre se ha viciado en su práctica burocrática, ya que las religiones institucionalizadas imponen un ENLACE a la práctica político y gubernamental, es decir estas atado a seguir una ley o mandamiento.
¿RELIGION O ESPIRITUALIDAD?
La religión se basa en experimentar lo que otro te dice, la espiritualidad se basa en tener la propia experiencia. En la religión terminas siendo sujeto de un dios, en la espiritualidad nunca terminas, siempre estás en busca de la divinidad que llevas dentro, por lo tanto eres libre, nunca sujeto. La religión inspira miedo con el infierno, el karma u otra condena, la espiritualidad en cambio te da el coraje para superar el miedo, tu infierno interior y te da la fuerza para salir de él y acabar con el karma, por lo tanto, el verdadero ser espiritual comienza del infierno, ya estuvo allí, es comprensivo, su misericordia nace del infierno vivido y no del cielo prometido jamás visto. Un religioso cree que nació con el pecado como un ser impuro e imperfecto por lo que se siente perdido y necesitado de ser redimido y por lo tanto salvado; una persona espiritual sabe que nació absolutamente pura y perfectible, sólo tiene que redescubrir esa perfección olvidada y enterrada en él. La religión se convierte entonces en un fenómeno de masas, una necesidad de confirmación social, una estructura politica, mientras la persona espiritual experimenta la espiritualidad en su soledad, está seguro de sí mismo, no hace ruido, no hace proselitismo, simplemente vive. A las religiones les interesa la cantidad (cuantos son, si son la mayoría)
a la espiritualidad le interesa la calidad (si de verdad vives tus principios).
BUSCO LA ESPIRITUALIDAD, EVITO LAS RELIGIONES
No uso la palabra religión como una característica del alma, sino como una denominación social y política de ciertas instituciones de carácter sagrado. Así que seamos claros. Hoy la palabra RELIGIÓN (como tantas otras sin testimonio de la verdad) ha sufrido una inflación en la realidad. Yo personalmente no soy portador de ninguna religión (como Jesús que no quería ninguna religión) pienso que si vivimos en coherencia con la naturaleza descubriremos una forma de VIVIR que refleje la verdad. Hoy las religiones se consideran poseedoras acaparadoras de esta verdad: en el supermercado de las religiones cada uno saca agua para su propio molino, venden un CURSO para TENER lo divino, en vez de sentir un camino de vida divina para SER espirituales y divinos. Prefiero decir que una persona es más bien espiritual que religiosa. La palabra religión, como la palabra Dios, es muy ambigua hoy en dìa, está cargada de muchos prejuicios y produce urticaria.
¿ACCIÓN PERSONAL O MOVIMIENTO DE MASAS?
La religión eventualmente se convierte en un fenómeno de masas, pero bien sabemos que la masa es impersonal, mientras que la espiritualidad no es un fenómeno, sino una experiencia puramente personal, de ahí entendemos que, si todos los líderes espirituales (Jesús, Gandhi, Buda, Krisna, etc.) fueron personas que compartieron su espiritualidad PERSONAL, esta nunca debería ser accesible a nivel masivo, como el fenómeno de masas, precisamente porque es personal, hacerlo colectivo es la forma institucional de desnaturalizarlo. La espiritualidad es una cuestiòn muy intima, como el sexo, entonces es una cosa entre tu y tu divinidad, entre ti y tu Ego, entre tu ser il el Ser, nada que ver con la colectividad, no es una orgia social (esa comunión de los santos algunos se la esperan en algún cielo).
La diferencia entre un hombre religioso y uno espiritual es que el primero, siendo parte de un todo, ya no se preocupa por sí mismo, es una oveja del rebaño, lo que cuenta es el rebaño no la oveja, la asociación, mientras que el hombre espiritual cuenta y enfoca todo por sí mismo, pues asì el primero (religioso) vive de apariencias o convencionalismo social, el segundo (espiritual) vive en cambio de la profundidad y realidad de su experiencia personal. En pocas palabras, el primero habla de oídas (el cliché, repite como un loro lo que lee o le dicen) el segundo habla de su experiencia (por lo que ha hecho y vivido). El hombre religioso tiene una praxis (practica) de vida impuesta por las leyes y mandamientos y por ello exterior, el espiritual por lo que vive, por lo tanto interior, a partir de la cual le es fácil al hombre espiritual actuar sin coacción, todo lo contrario al religioso donde su vida está llena de reglas, mandamientos y ritos a realizar según un horario; entonces en el peor de los casos, como en el fundamentalismo, acaba teniendo que actuar hasta con violencia para creer que lo que hace es verdad.
JESÚS ERA LAICO PERO ESPIRITUAL
Los grandes impulsores de los movimientos sociales, era al mismo tiempo y precisamente contra el sistema social, fueron todos laicos (Abraham dejo su tierra y sus dioses y Jesús lo mismo, si analizas los evangelio con mente hebrea era contra la religiòn, era un revolucionario). La distinción entre ser espiritual (sin etiquetas políticas y religiosas institucionalizadas) y religioso, que a menudo pertenece a entidades comunitarias, es obvia, pero laico no siempre es lo opuesto a religioso. El término laico es hermoso, perteneciente al pueblo, pero el laicismo hoy también es laico por lo que no siempre tiende a la espiritualidad, el laicado también existe en la política, nuestra ciencia moderna es laica por ejemplo pero no es para nada espiritual, es solo pragmatica y materialista; por eso no uso el término laico, aunque es correcto, porque es muy ambiguo, simplemente mira cuántos políticos defienden el laicismo pero son corruptos, ni siquiera un mínimo de espiritualidad. En el mismo evangelio Jesús huye de ser nombrado rey, se esconde y confunde a los demás cuando lo llaman mesías, él no querìa ser el mesías y no lo era (como lo demostraremos en otros post), sabía del peligro que traen consigo los fenómenos de masas, son intrínsecamente irracionales y corruptos.
EL ESPÍRITU DE LA MENTE
En nuestras conferencias sobre el alma hemos insistido mucho en aclarar la distinción entre alma y espíritu, la mente en cambio es una de las potencias del alma, a través de la cual el alma puede manifestarse y cuando se manifiesta se transforma en espíritu. Hagamos siempre el ejemplo de siempre: Un hombre que habla solo de futbol decimos que tiene un espìritu deportivo, una mujer que habla solo de sus hijos y sus cuidados decimos que tiene espíritu maternal, una persona que habla solo de sexo decimos que tiene un espìritu morboso, un hombre que està siempre enojado, grita y dice cosas brutas y atroces decimos que tiene un espìritu violento y asi... El espìritu es lo que impregna el alma de un individuo (no confundas espìritu con alma, son dos cosas diferentes: el alma es la esencia como la de un perfume, su espíritu es el olor de ese perfume, es decir el que emana del perfume, su fragancia). Así que no pienses que la mente y el alma de una persona religiosa es necesariamente espiritual (por espiritual se entiende el bien, la armonia, la paz, la belleza), es màs muchas veces sucede todo lo contrario. La mente, como los paracaídas, funciona si está abierta, como decía Einstein, y la mente espiritual, así como las flores, debe oler a libertad y comprensión. Muchos pretenden tener una mente abierta, pero en realidad están rotas o divididas por dentro, como lo demuestra su rigidez, su moralismo escandaloso, su perfeccionismo puritano y despiadado, su irritabilidad temperamental de solterones empedernidos. Lamento decirlo pero el hombre religioso no es espiritual, es moralista, perfeccionista, cruel, muchas veces intransigente, farisaico y tan ajeno al ser humano en su halo pseudo-angelical que muchas veces es hasta inhumano (pensemos que las guerras màs cruentas en la historia son aquellas hechas en el nombre de Dios). La espiritualidad es un asunto personal, la religión en cambio se convierte en un fenómeno de masas que necesita estructuras que la gestionen y esto al final siempre hace de la religión un movimiento social y luego político y es aquí donde se pierde el espíritu espiritual: las instituciones para sostenerse necesitan dinero y ya sabemos como van a terminar las ideologías de la pobreza: una mina de dinero. Se me cae el alma por el suelo cuando entro en algunos templo cubiertos de oro y escucho hablar de orar por los pobres... este es el fruto de la religión, no de la espiritualidad.
UNIÓN SÍ, UNIFORMIDAD NO
Independientemente de la raza, la edad y las diferentes culturas, las personas espirituales no se van a las etiquetas, se reconocen y se sienten unidas. Una característica que distingue al ser espiritual es que sabe reconocer a otras personas espirituales, aunque expresen la verdad de manera diferente, la verdad es siempre una sola. Los religiosos, en cambio, quieren la uniformidad, todos deben abrazar los mismos colores, la misma fe, el mismo pensamiento, eliminan a los que piensan o sienten diferente, no saben conciliar la diversidad en la unidad, prueba de ello son las innumerables sectas y religiones que declaran la misma fe y el mismo Dios pero nunca el mismo amor entre ellos. Todas las falsas religiones están divididas y nunca están dispuestas a abrazar al otro tal cual es, sólo nos une la verdadera espiritualidad, porque el amor sabe reconocer al amor, es un lenguaje.
La palabra religión, como la palabra Dios, está llena de prejuicios, preconcepciones y presentimientos fundados por los errores de siglos que las mismas religiones han cometido a través de la humanidad. Es hora de comprender que la búsqueda interior del hombre por su trascendencia pasa por su corazón y no por las instituciones sociales que siempre terminan en jaulas políticas y burocráticas.
LA RELIGIÓN ES FILOSOFÍA,
LA ESPIRITUALIDAD ES VIDA
Recordemos que la filosofía es algo con lo cual o sin lo cual te quedas tal cual, es decir, es un juego de palabras si no se pone en práctica. Se convierte en un juego mental para sabelotodos que fascinará a los más ignorantes. Esto te lo dice uno que hizo filosofía en la universidad durante 4 años y continua toda la vida (màs de 50 años) a jugar con este jueguito abstracto mental.
Jesús nunca buscó maestros, sino amigos llamados discípulos, no los hizo profesionales y no les dio grados ni ministerios, pero les dio su corazón como prenda de fortaleza y les pidió que nunca se llamaran maestros; su vida no fue una doctrina sobre la que discutir y hacer dogmas y pelear quien tenía la Verdad en el bolsillo ni el Espíritu de Dios en la mano, sino que su vida fue la comunicación de experiencias vitales. El cristianismo se prostituyó cuando la vida de Jesús se hizo doctrina y dogma en manos de ministros expertos que controlan la verdad según su voluntad, llamados inspirados y guiados por el mismo "Dios" y en el nombre de este Dios que murió pobre en una cruz, se hacen pagar y llamar doctores.
SUPERSTICIÓN O FE?
Hoy por religión entendemos màs que nada un puño de supersticiones de una sabiduría perenne de la que sólo tenemos una vaga y distorsionada idea, que unía la ciencia y lo sagrado, la física y la metafísica, por lo que hoy en día a falta de una Verdadera Religione (espiritualidad encarnada en la vida diaria), la gente siempre acaba volviendo a la idolatría, la magia y la superstición, incluso muchas religiones de gran importancia social (como el cristianismo o la fe musulmana) se viven con este molde supersticioso: Dios actúa contra la naturaleza, la dominará, hará milagros al romper las leyes de la misma naturaleza que Dios creo, etc... La espiritualidad, por otro lado, se basa en la Fe, que es la aceptación plena de la naturaleza donde està presente el mal, la muerte y la enfermedad e incluso la ausencia misma de Dios.
El hombre, sin embargo, por naturaleza necesita creer en algo, de lo contrario su psiquismo se siente atrapado en la finitud de la misma naturaleza que es transitoria, por lo que al no encontrar la espiritualidad sana y verdadera termina arrojándose en las creencias supersticiosas más pueriles y vulgares.
La religión no siempre produce espiritualidad, las personas que dicen tener una religión no siempre recorren un camino espiritual de liberación interior, para ellos tener una religión es solo una etiqueta de pertenencia social, cultural, tradicional e incluso política, pero nada más.
La religión recrea artificialmente un mundo espiritual, pero como es teórica, basada en sermones, estudios, análisis exegéticos y filosóficos, en fin, en el mundo platónico de las ideas, entonces no se materializa, es virtual, ilusoria y por lo tanto decepcionante al final, en una palabra RELIGIÓN ES LA AUSENCIA DE LA ESENCIA. Mientras que la ESPIRITUALIDAD es todo lo contrario, es decir, es la ESENCIA DE LA AUSENCIA, es el sentir, lo vivido, el verbo encarnado, la vida, lo real. Quien concibe a Dios por ahí en algún lugar tiene que capturarlo en un mundo imaginario, pero Dios no está fuera de tu mente sino que vive dentro de ti, si lo descubres serás capturado y poseído por esta energía, si no lo descubres seràs capturado por cualquier ideologia barata.
La religión es hablar a la gente.
La espiritualidad es hablar con la gente.
La religión es hablar de Dios,
la espiritualidad es hablar con Dios.
La religión es entender la vida.
La espiritualidad es vivir.
La religión es enseñanza
La espiritualidad es dar ejemplo
¿POR QUÉ EL SEXO ES UN PROBLEMA PARA LA RELIGIÓN?
Todas las religiones tienen problemas con el sexo, pero dado que el sexo es un fenómeno natural, esto significa que el problema no es el sexo sino la religión que no puede manejar esta energía tan natural. Quien sabe manejar esta fuerza la convierte en su amiga, aliada, cómplice. Los que no saben manejarla, al igual que la religión, tratan de justificarse haciendo del sexo el enemigo, sucio, asqueroso, demoníaco, inmundo. Pero de esta manera la religión no muestra más que su debilidad e incapacidad. No puedo concebir un cielo angélico poblado por seres asexuales dirigidos por un Dios incorpóreo y abstracto, es lógicamente incompatible con nuestra naturaleza humana, nuestro entendimiento racional no puede alcanzar esta forma de vivir, mucho menos nuestra sensibilidad psíquica. Si Dios nos hizo a su imagen y el sexo està en nosotros tienen que estar también en Dios.
¿Cómo podemos pensar entonces que es la élite religiosa capaz de regular la vida sexual de sus fieles, cuando éstos viven en una castidad forzada incluso no facultativa? Si esta castidad fuera la culminación plena de una comprensión de la dimensión corpórea física y sexual, entonces sí, sería razonable, pero se originó más bien como un desprecio por el cuerpo, una orgullosa satisfacción arrogante y a veces demoníaca de creerse superior en naturaleza (casi angelical) y por otra parte porque el clero no podía dar en herencia los bienes de la Iglesia y por tal razòn ECONOMICA impusieron la castidad al clero; basta pensar en las atrocidades ya escritas por los padres de la Iglesia medieval respecto a la mujer, el parto, la familia, como una vida de segunda mano, de serie B, un mal menor, un pecado inevitable. Personas tan santas que han podido dedicar su vida a Dios, gracias a dos padres pecadores que los parieron a través del sexo que huyen y que inconscientemente o inconscientemente temen. No nos sorprende, por tanto, que las religiones a menudo acaben siendo sexofóbicas, misóginas, machistas, homofóbicas y por otro lado impregnadas de una pederastia latente: lo que rechazan los domina inconscientemente.
PD: en la foto Jesùs que habla en publico con una prostituta, un pasaje luminoso del evangelio.
Debemos liberar a Dios del concepto de poder de manera que ni la política ni la religión institucionalizada puedan utilizarlo como instrumento de ideología pasiva a su favor, manipulando al pueblo para que obedezca ciegamente. Hoy hay un creciente movimiento secular espiritual que pone en jaque al poder religioso que no puede ser espiritual, porque està mezclado con la política y usa a Dios de manera vulgar y ambigua. La espiritualidad es una dimensión del ser humano, no de unos burócratas que se creen elegidos. Es normal que haya una gran confusión y caos entre las diferentes corrientes espirituales que surgen hoy en dìa, pero es la prueba del despertar del hambre espiritual de las personas que ya no son ingenuas para creer ni en la política ni en la religión. Lo que pasó en tiempos de Jesús contra los romanos, como los esenios que eran considerados herejes y locos, es lo que está pasando hoy y ha pasado siempre: los librepensadores somos considerados herejes y locos, pero somos la voz de Uno que clama en el desierto y esto es una amenaza para la clase dominante.
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