¿Por qué los hombres prefieren las vírgenes? Porque no les gustan las críticas y se sienten más seguros con mujeres inseguras, pero luego, para ser honestos, aceptemos que la virginidad, por fortuna, está desactualizada, así que dime más bien, ¿con quién has perdido la sensibilidad, el miedo y la estupidez?
Hablar a favor de la virginidad es culpar a tu madre.
(William Shakespeare)
1O VIRGENES, ¿PERO UNA NO ERA SUFICIENTE?
Le pregunté a un prelado por qué no podía tener un amante, me dijo que el amor es sagrado y fiel por lo tanto monógamo, la poligamia era un pecado; luego le pregunté por qué Jesús habla de alguien que se casa con diez vírgenes; un poco con la voz quebrada me dijo que era un símbolo, Dios era visto como el novio y su pueblo como la novia. Eso yo ya lo sabìa, Dios se une a sus fieles como en un matrimonio. Pero entonces, sin comprender, le pregunté todavía: pero si ponía solo una virgen como símbolo de su pueblo y no diez vírgenes, ¿no era lo mismo? ... y me cerró la boca con la respuesta habitual: es un misterio de la fe. Pero, ¿por qué llamar dogma de fe a lo que no entiendes y mucho menos no sabes explicar?... porque se necesita una comprensión esotérica y psicoanalítica, estas son las claves hermenéuticas con las que se puede decodificar el lenguaje antiguo y la Biblia està llena de este tipo de lenguaje... me fui y deje al sacerdote con su fe, yo todavìa me pregunto ¿por què, si la monogamia era sagrada para Israel, sus patriarcas Abramo, Isaac y Jacob eran polígamos?
UN SENTIDO ESOTÉRICO PERDIDO U OCULTO DETRÁS DE EL HIMEN VIRGINAL
Antes de analizar esta parábola, es fundamental leerla en su totalidad, dada la creciente falta de conocimiento del evangelio y hay que tener en cuenta que la mentalidad occidental ha sido plasmada con la Biblia y si queremos desactivar los mecanismo psìquicos que nos condicionan hay que desmontar la Biblia con sus mismas palabras y herramientas. En un libro homeopàtico: tiene el mismo veneno que nos hace mal, si no lo tomamos en la justa dosis nos mata psìquicamente:
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: "Se parecerá el reino de los cielos a diez doncellas que tomaron sus lámparas y salieron a esperar al esposo. Cinco de ellas eran necias y cinco eran sensatas. Las necias, al tomar las lámparas, se dejaron el aceite; en cambio, las sensatas se llevaron alcuzas de aceite con las lámparas. El esposo tardaba, les entró sueño a todas y se durmieron. A medianoche se oyó una voz: "¡Que llega el esposo, salid a recibirlo!" Entonces se despertaron todas aquellas doncellas y se pusieron a preparar sus lámparas. Y las necias dijeron a las sensatas: "Dadnos un poco de vuestro aceite, que se nos apagan las lámparas." Pero las sensatas contestaron: "Por si acaso no hay bastante para vosotras y nosotras, mejor es que vayáis a la tienda y os lo compréis." Mientras iban a comprarlo, llegó el esposo, y las que estaban preparadas entraron con él al banquete de bodas, y se cerró la puerta. Más tarde llegaron también las otras doncellas, diciendo: "Señor, señor, ábrenos." Pero él respondió: "Os lo aseguro: no os conozco." Por tanto, velad, porque no sabéis el día ni la hora."
Mateo 25:1-13
¡¡¡PAREN, ALTO, DETENGASE TODOS ... AQUI NADA DE SEXO !!!
Hablar hoy de la parábola de las 10 vírgenes que estàn esperando la boda con Jesús es una empresa titánica, sobre todo para las mentes más jóvenes, porque no conociendo la cultura antigua te hace imaginar las aberraciones más terribles: "Jesús el novio con 10 vírgenes, puès serà una orgía de locura, tiene 10 mujeres que ya se pelean por èl, pero él hace el chico duro y difìcil hacièndose esperar, y es tambièn exigente porque es necesario que sean vírgenes, entonces él serìa un depravado y el reino de los cielos parece un burdel, etc, etc"... Ese es el peligro de no trasformar los sìmbolos, de no traducir los arquetipos. Nada más equivocado y alterado que este tipo de imaginaciòn. Esta es una parábola por lo que todos son símbolos y además son realidades interiores que hay que leer en primera persona sobre sí mismos. La boda es el arquetipo de la unión interior de nuestras dos dimensiones psíquicas, masculina y femenina (Adán y Eva) entre la cabeza y el corazón, entre decir y hacer (cielo y tierra). Jesús el Esposo (el Yang) es la verdad, la luz que busca el sentido, la realidad, la Materia para fecundar (el Yin, la mujer, la creación) es decir para darle un sentido de vida. Mientras que para los antiguos "virgen" representaba esotericamente una persona que no depende de nadie para ser completa, plena y realizada, aún no poseída como persona, solo más tarde llegó la visión material y morbosa reduciendo todo a la virginidad física o vaginal: para los cristianos " virgen ” significa exclusivamente la vagina como una cosa objeto no usado (en cuanto a la Virgen cristiana, María, la virginidad en ella no es de una persona sino un objeto de estudio dogmatico y ginecológico con apariencia espiritual, del cual hablaremos en otra ocasión). Una relectura indispensable del sentido psíquico y espiritual de la virginidad es más que necesaria y obligatoria para librarnos de una falsa pureza egotica.
CONTEXTO SOCIAL E HISTÓRICO
En el tiempo de Jesús los matrimonio no se celebraba con un rito religioso (repitámoslo: no eran sacramentos, no era un vìnculo religioso), a menudo era un acuerdo que se convertía en un contrato real entre dos familias (repitámoslo: era un contracto social). Se requería de la mujer una buena dote y sobre todo las virtudes descritas en la Biblia y la virginidad; la virginidad fue un requisito maschile, le aseguraba que la mujer no era usada, que su prole serìa suya, motivaciòn falsa, bien sabemos hoy que en las familias tradicionales el 10% cerca eran hijos ilegítimos (tenidos de aventuras clandestinas).
El matrimonio se celebraba por la tarde o bien entrada la noche, con una duración de hasta siete días. El matrimonio era algo importante e indisoluble, tanto que las causas de ruptura como el adulterio se castigaban con la muerte (adulterio de la mujer, no del hombre como si èl no pecara con la infidelidad). La casa del novio estaba preparada para el banquete. Había mesas con comida local, el ambiente era de alegría enriquecido con cantos y bailes. La procesión partía de la casa del novio; este último con sus amigos se iba a la casa de la novia y después la llevaba, con bailes y canciones a la casa de la boda. Todos con sus propias lámparas. Al igual que el novio, la novia también tenía amigos que la ayudaron en la preparación. El novio a menudo llegaba tarde y la noche se volvía pesada, lo que provocaba cansancio. También solían anunciar la llegada del novio y todos tenían que salir a conocerlo. Esto significaba deseo, fidelidad y amor para el novio. Las lámparas eran fundamentales: cuando la fiesta era de noche se usaba para ver el camino, evitar huecos y piedras, alejar a las bestias del campo y a los ladrones. Dado que en el matrimonio judío antiguo, solo el Novio y la Novia entraban solos a la Jupá (= cámara nupcial), está claro que las vírgenes de la parabola que vamos a analizar representan a la Novia misma, y no deben ser consideradas damas de honor.
VIRGEN ¿EN QUÉ MANERA?
Cuando se habla de virgen en el evangelio, en un contexto matrimonial como el de la paràbola que estamos analizando, se entiende niñas de entre 12 y 14 años y medio listas para casarse. En la antigüedad la mujer era apta para el matrimonio cuando su naturaleza de mujer lo indicaba (con el primer ciclo menstrual). Este término define su condición en la sociedad patriarcal: ella se ofrecen en el mercado matrimonial. Su trabajo es presentarse como buenas futuras esposas. Pero si interpretan el evangelio siguiendo esta costumbre social sin decodificarla, esta parabola se presta a patrocinar la perspectiva patriarcal, porque muestra la dura realidad de una sociedad que define a las mujeres en función de su capacidad de adaptación, de someterse al hombre y de ama de casa (electrodoméstico humano). Aqui se alaban las mujeres sumisas premiándolas con la sugestión mental llamándolas sabias, pero no es màs que una "complicidad" con el patriarcado. Las no sabias tambièn cumplieron su deber y objetivo, pero el novio se demuestra caprichoso, intransigente y machista, por eso no puede representar a Jesucristo Libertador de tabúes, porque en el amor lo importante es llegar, no importa si un poco tarde, recordemos que el que tardaba primero era el esposo y despuès las condena a ellas porque tardan accidentalmente, ¿con cual coherencia las condena? La tradición interpretativa alegórica haría del representante de la injusticia social, es decir el cónyuge, una figura arbitrariamente divina y corrompería así el evangelio.
Entonces al final las vírgenes a las que llaman necias tenían el aceite adecuado, confiaron en él que habrìa llegado a tiempo en cambio él fue el que llegó tarde, se acabó el aceite y se quedaron jodidas, en cambio las llamadas sabias no se fiaron de él, ellas tomaron aceite extra, lo engañaron (en ese tiempo el novio que solía tener una fiesta con sus amigos llegaba tarde a recoger a la esposa). Así que repitámoslo, comparar a Jesús con este tipo de cónyuge es arriesgado, hay cierta ambigüedad a menos que encontremos la interpretación esotérica.
VIRGINIDAD EN EL ALMA
Bien conocida es la práctica de la virginidad física, una verdadera fijación diría no del himen intacto sino mental, una fijación morbosa, convertida en tabú en muchas culturas y tradiciones, hasta lo improbable e incluso absurdo. Si se considera un símbolo de pureza, ya desde el principio se le da una connotación puramente sexual y material, por tanto desviada, neurótica, por lo que las no vírgenes son impuras y el sexo sucio (nada más malo que esta visiòn), esta visiòn reduce la mujer a un objeto que tiene valor si no està usado. Todo esto hace evidente nuestra naturaleza desequilibrada: el sexo está implícito en la naturaleza, hacerlo es parte de la evolución humana, por lo que es una exageración limitar el símbolo solo a la esfera física y del cuerpo. Una persona puede ser virgen físicamente pero marcha, traicionera y maligna en el alma y viceversa. El himen no es un cierre en el cuerpo sino una apertura en la mente, como el nudo de un lazo de un regalo, es un regalo de plenitud física que fluye hacia una plenitud interior (de lo contrario, si es solo físico la virgen es solo una torpe más que inicia a hacer experiencia), por lo tanto la verdadera virginidad nunca se pierde, se da, es la integridad del alma que una vez que alcanza su plenitud ya no se siente atraída por ningún mal, es decir ya no es corruptible, aquí la pureza lograda su plenitud después de tantos errores, fracasos, dolores de parto, por la que se alcanza la virginidad interior y una vez adquirida nunca se pierde, es más, crece (pregúntenle a cualquier mujer cual es el primer hombre en sus vidas y te dirà que el que màs aman, no importa si fue el primero o el ultimo, su virginidad se la dan solo a ese amor y nunca la pierden, solo ese amor conoce su pureza, porque no es el primero que entra entre sus piernas sino el ultimo que no sale de sus corazones. He conocido prostitutas vírgenes, mujeres que nunca han amado y nunca han sido amadas).
Esotericamente el signo de la virgen representa así el fin de la involución del espíritu en la materia, es al mismo tiempo una conclusión y una partida. Conclusión del ciclo vegetal, el final del verano es también la época de las cosechas, la tierra productora, ha agotado todos sus recursos. Ahora está cansada, estéril. Pero también es una tierra virgen, lista para recibir una nueva semilla. El alma virgen por tanto no es la que no tiene experiencia y novicia, lo contrario es la que se forja por mil errores, viaja por todas partes, navegada y llena de heridas. Es el paso de la conciencia en su vacuidad a la plenitud del espíritu. Pero una vez más es el Egipto el que nos da la clave. El ideograma astrológico del signo de Virgo recuerda la letra M, es decir, representa la materia prima. Y en los jeroglíficos egipcios, esta letra está representada por el búho, correctamente tomado como símbolo por la tradición griega. El búho es esa mirada sabia, divina que logra captar en la oscuridad, es decir, en el inconsciente y en la ignorancia, la luz de la razón, la verdad de las cosas, de la Materia. El alma virgen por tanto no es la ingenua que no ha tenido experiencia, al contrario su poder es el de la penetración del espíritu, el de una mirada diferente traída al mundo y que nos permite percibir realidades que escapan a los demás.
EL REINO DE LOS CIELOS, ¿DÓNDE ESTÁ?
"Entonces, el reino de los cielos será como diez vírgenes ..." así es como comienza esta parábola, pero detengámonos por un momento:
El reino de los cielos no es un lugar específico, es un estado de ánimo, no se esconde detrás de alguna galaxia lejana, el mismo Jesús lo dijo: está ubicado dentro de ti, por lo tanto no es un reino político ni un poder social, es una conquista interior: es cuando eres dueño de ti mismo, cuando tu conciencia alcanza la plenitud de ti mismo, cuando tus pasiones y sentimientos como sujetos siguen tu voluntad, asì que estás en posesión de todo tu potencial, dominas tus demonios, superas tus vicios, mantén a raya tus defectos, sabes colmar tus compensaciones psíquicas. Entonces, como dijo Jesús, Dios se revela en ti, permanece en ti, descubres la dimensión de lo divino.
EN EL SIGNO DE LA VIRGEN
EN BUSCA DE UN SENTIDO EXISTENCIAL
Esta parábola está enteramente envuelta en el signo de la Virgen, como se mencionó anteriormente, símbolo de plenitud, de búsqueda espiritual, de espera: "... diez vírgenes que, tomando sus lámparas, irán al encuentro del esposo" Es curioso que la palabra Belem, lugar donde nacìo el Cristo, significa la casa del Pan, y la Virgen era tambièn eso: la casa del Pan, de la subsistencia que hay que buscar a ciegas. El alma en nosotros camina en la oscuridad, la noche de la existencia, es el símbolo de la incertidumbre terrena y de una vida verdadera que "hay que buscar" con la Linterna, como Diógenes que buscó al hombre con la luz ... La Linterna por lo tanto asume este significado de "iluminación" interior necesario para continuar un camino tan difícil que se llama existencia terrena.
Hoy se habla tanto de iluminados interiormente pero por fuera estàn apagados: hay que iluminar tambièn la materia, la linterna. La linterna es la parte material, como lo es un libro espiritual que lees, mientras que el aceite es la experiencia, solo la luz, la que vives de ese libro, es la iluminaciòn. Esta linterna debe mantenerse encendida y lo único que alimenta la luz de la vida es el amor. Entran entonces en juego las llamadas 3 virtudes teologales: la oscuridad o noche de la fe, la esperanza de un farol que ilumina y el óleo del amor. Pero, ¿por qué hay 10 vírgenes?
¿POR QUÉ ERAN 10 VIRGENES?
Los antiguos solían utilizar números como símbolos, eran claves para lecturas que se han ido perdiendo con el tiempo. No podemos tomar el número 10 literalmente como si en realidad fueran 10 mujeres (como dicho prima, no es una orgia nupcial poligama de un esposo con 10 esposas), mucho menos pensar que algunas mujeres sabias no pueden ayudar a otras tontas y darles consejos, amor, esperanza (el aceite que falta) de lo contrario vendría una interpretación más ambigua y el buen Dios podría haber preguntado: "¡No querías compartir tu amor (el aceite) con los demás y por lo tanto, no te conozco!" El mismo Esposo seria un caprichoso que hace esperar pero no espera. Este aceite es por tanto algo muy íntimo, tan íntimo que no se puede dar a otros, por eso hay que entenderlo como algo interior, una relación con nosotros mismos (con nuestro potencial divino) entre el bien y el mal, en este caso las vírgenes prudentes y las insensatas son dos dimensione de nosotros mismos; si lo imaginamos como si nosotros fuéramos los sabios y otros los necios, ya aquí nos quedamos por fuera de la cámara nupcial y los necios somos nosotros. El número 10 es un símbolo de perfección, ya que reúne en una nueva unidad todos los principios expresados en los números del uno al nueve. Es el inicio del union: Yin y Yang (vìrgenes necias y vírgenes sabias) Esta simbología sugiere la hipótesis de que la década representa la perfección relativa al espacio-tiempo circular, o más bien a la inmanencia divina. Diez indica el cambio que permite al iniciado evolucionar, crecer y elevarse espiritualmente. 10 son los sentidos en nosotros (5 externos + 5 internos: los externos son los necios, los internos son los sabios) como 10 son los dedos de las manos. Por tanto, las diez vírgenes simbolizan la obra del espíritu a través del cuerpo y viceversa.
NO ES SUFICIENTE SER VIRGEN SI NO ES POR AMOR
Veamos el comportamiento de estas diez vírgenes: "Cinco de ellas eran insensatas y cinco prudentes. Las insensatas al tomar sus lámparas, no llevaron aceite consigo. Pero las prudentes, junto con las lámparas, también llevaron aceite en las tinajas". Ves que no es suficiente ser VIRGENES; no basta con decir que eres un creyente o un espiritual (no basta la lampara), es el comportamiento, en consecuencia, lo que marca la diferencia. Los tontos también tenían lámparas pero inútiles, sin aceite, aquí están las personas que tienen alma, corazón, espíritu y cerebro, pero vacías, sin conciencia, sin principios, sin pasiones trascendentales, no llegarán lejos por mucho tiempo, porque "el novio llegó tarde, les entró sueño a todas y se durmieron". Atenciòn: TODAS se durmieron, el dormir en el espìritu en un estado de inconsciencia. El sueño es el entumecimiento de la vida con su inevitable pesadez, debilidad humana, incertidumbre existencial que recae sobre todas las personas. Y es en ese momento que vemos la diferencia entre quien tiene carácter, personalidad, espíritu y entre quien es un carácter simple, oveja entre la masa, superficial y materialista, hasta persona con mucha cultura pero poca experiencia vivida.
LOS 10 SENTIDOS QUE ALIMENTAN A LA VIRGEN DEL ALMA
Existe una lectura esoterica de las vìrgenes del alma: El alma humana es una esencia que actúa a través de sus 2 poderes: entendimiento y voluntad (comúnmente llamados cabeza o mente y corazón) el primero conduce al conocimiento (la verdad) y el segundo a la emotividad (el amor), juntos conforman la consciencia. Pero estos poderes aprenden la realidad a través de 10 sentidos: 5 externos (vista, tacto, olfato, oído y gusto) y 5 internos (pensamiento, atenciòn, intuiciòn, instinto, sentimiento). Las vírgenes prudentes son las que se alimentan con aceite o esencia espiritual: son los sentidos que arden con una nueva luz, son todas esas actividades trascendentales con las cuales nos iluminamos. Como el novio llegaba tarde (Dios no es puntual no vive en la dimensiòn del tiempo), todos se durmieron. A medianoche se escuchó un grito: “¡Aquí está el novio! ¡Ve a conocerlo! ”. Como hemos dicho, el esposo es el mundo del Espíritu. La humanidad "se duerme" dentro de la vida en el mundo físico. Si no alimentas tus sentidos con cosas verdaderas, sabias lecturas, meditación, reflexión, autoconocimiento, sabias amistades, etc ... en el momento de la llamada (a menudo aburrimiento, desesperación, dolor, muerte, etc. son todas llamadas de lo eterno, del alma, de la otra vida), vemos aquí a la humanidad "tonta" que siente que está perdiendo la posibilidad de ser consciente: las lámparas (el cuerpo físico) se apagan: el cuerpo físico se desintegra y el alma interior se apaga si no le das a tus sentidos alimento espiritual profundo y se vuelve incapaz de sostener una conciencia despierta. La parte tonta de nosotros pedirá tiempo (aceite) para divagar, para distraerte, para escapar de sí mismos, aquí están las vírgenes tontas que desperdician lo mejor de ti; pero un alma despierta, ardiendo de verdad, no hace caso de este impulso materialista y apasionado del cuerpo, no malgasta su aceite, su tiempo, su dedicación en cosas fútiles. Recordemos, si vives solo en la superficie, serás una persona que usa solo los sentidos externos (como los animales), solo serás vìrgen necia, tonta, carnal, superficial. Alimenta a los internos con sentidos trascendental (aceite) y te llevarán más lejos.
EL ACEITE DEL ESPÍRITU
Las vírgenes insensatas en medio de la oscuridad descubrieron que no tenían aceite para sus lámparas. Las insensatas dijeron a las prudentes: "Danos un poco de tu aceite, porque nuestras lámparas se apagan". Pero los prudentes respondieron: "Por si acaso no hay bastante para vosotras y nosotras, mejor es que vayáis a la tienda y os lo compréis." Hay que tener en cuenta que el aceite simboliza simultáneamente un elemento que aísla, delimita, impermeabiliza las partes interiores. No es casualidad que las personas adictas al espíritu estén aisladas, como el aceite no se mezclan con la multitud, pueden darte una mano, darte consejos, pero nunca te darán su intimidad si no eres de su misma naturaleza, aman todo su tiempo y no aceptan desperdiciarlo en charla fùtiles, fiestas inútiles, entretenimiento vagos y efímero; muchos te dirán que compres este aceite en falso pasatiempos mundanos: "más bien ve a los traficantes y cómpralo", cómprate la felicidad falsa y la paz falsa que te ofrece el consumismo materialista. Desde este punto de vista, los sabios realmente parecen egoístas y lo son cuando se los ve desde su mundo cerrado, hermético, extraño, pero es, por otro lado, una dimensión que al mundo no le importa. Y todavía tenemos que lidiar con el mundo, por eso una parte de nosotros sigue siendo tonta (son nuestras vírgenes imprudentes). El aceite se quema, esta es la parte más difícil de vivir en el espíritu, te estás consumiendo a tí mismo, es ver que el mundo va en sentido contrario, es sentir por momentos que parece que incluso estás equivocado sin importarte sobre las vírgenes insensatas, pareces arrogante y presuntuoso pero no te importa ni siquiera èsto, sabes que es un sacrificio que tienes que hacer por la opinión de los demás, su aprobación y comprensión. Las vìrgenes sabias se comportan como necias no demostrando comprensiòn ni altruismo por las necias, pero tu ni por amor te puedes rebajar al nivel del insensato, no importa cosa diga o piense de ti.
CUANDO LLEGA LA LUZ ES PORQUE TODO ESTÁ EN LA OSCURIDAD
Aquí está la llegada del novio, parecería algo hermoso y emocionante, pero en la vida es un momento terrible, el novio es la verdad, la luz, el momento de darse cuenta de un fracaso, una decepción, una pérdida de tiempo, viene esa luz de la conciencia que la mayoría teme. Por eso la parte superficial de nosotros está vagando, como vírgenes insensatas: "Mientras iban a comprar, llegó el novio, y las vírgenes que estaban preparadas fueron con él al salón de bodas y se cerró la puerta". Fueron a comprar el aceite no para él, sino para si mismas por eso no lo vieron cuando apareció. La vida es esa cosa maravillosa, dicen, que sucede cuando estamos ocupados haciendo otra cosa y no nos damos cuenta hasta que la perdemos. Quien recibe esos momentos con el corazón abierto recibe una luz (el novio) y entra en otra dimensión, no os extrañéis que si estas personas luego se cierran a otros intereses, la puerta de ese corazón permanece cerrada al mundo, a la necedad, a la locura. El mundo espiritual puede parecer un poco esnob, un gueto, pero es fascinante porque de lo contrario no dirían "Ábrenos" sino "sal". Por tanto, la historia continúa: Más tarde llegaron también las otras vírgenes y empezaron a decir: "¡Señor, Señor, ábrenos!". Pero él respondió: "De cierto te digo que no te conozco". Hay una parte de nosotros que es así: llama a las puertas del entendimiento, la meditación, la oración, la empatía y siente que nada se abre por dentro. No hay armonía, no hay resonancia, aquí está la voz que no nos reconoce porque todavía no somos nosotros mismos.
LA PARTE DE NOSOTROS QUE MENOS CONOCEMOS
Leyendo esta parábola, a simple vista, el Novio parece una persona consentida, caprichosa, casi cruel: eran vírgenes, querían casarse, ok hicieron un olvido pero también quisieron compensar el error, un poco de retraso y aquí están listas tocando las puertas, pero él no abre. Sin embargo, todo se vuelve comprensible si entendemos al Esposo como la conciencia y a las vírgenes insensatas como esa parte inconsciente de nosotros que, una vez que sale y vemos por fuera de nosotros (la demora) y en la luz (con el aceite comprado del dolor, la ansiedad, el fracaso, citas perdidas, etc.) entonces vemos esa parte de nosotros mismos que NO QUEREMOS, esa parte de nosotros mismos que decidimos dejar fuera de nuestro alcance y consentimiento, esa parte que no nos gusta, no la reconocemos como nuestra (no os conosco dice el esposo). Están ahí a la puerta de la conciencia (tantos vicios, tantas inclinaciones fatales de carácter, tantos defectos, tantos traumas) pero no les damos de comer, no se les permite al banquete de nuestra razón y nuestra aprobación (la càmara nupcial). Se quedan afuera pero ya no en la oscuridad (inconscientes) tienen el aceite de otra razón: la de la disciplina y la vigilancia. La que compramos a caro precio.
VIRGINIDAD E ILUMINACIÓN
Por lo que se ha dicho en esta parábola se puede ver muy bien que la virginidad es una condición o disposición del alma, no es una parte física de la vagina de la mujer, es un símbolo o arquetipo esOterico interior de la psique. Es esa plenitud e integridad de conciencia que nos permite entrar en unión (o matrimonio) con nuestra divinidad psíquica (el Novio) que es la iluminación, de la cual la virgen se convierte en sí misma en una lámpara, un banquete, una fiesta. La virginidad espiritual no se pierde como la física sino que se adquiere a medida que se avanza en lo más profundo del alma humana, porque se adquiere union, se vive el dual, la integridad, una visión completa de sí mismo y del mundo que nos rodea (incluida la parte nuestra tonta, la virgen necia, que está en la oscuridad, nuestra sombra).
PD: lo mismo se diga para la virginidad de Maria la madre de Jesús: es un simbolo, déjense ya de hacer los ginecólogos espirituales
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